jueves, 5 de junio de 2014

PRUEBA

Si había algo que Yadhira detestaba, eran las matemáticas. Nunca en su vida había entendido más allá de las 4 operaciones básicas, no veía la necesidad de aprender otras cosas de esa asignatura.

Poca gente sabía de eso, sus calificaciones eran muy buenas en todas sus materias. Tenía que salir con buenos resultados cada evaluación porque su madre, docente en una primaria de otra ciudad, era ridículamente estricta: no toleraba que su hija única tuviera menos que un 9 de calificación en cada materia cada vez que se citaba a los padres de familia para firmar las boletas.

Debido a eso, Yadhira desarrolló una habilidad singular para darse copia de la que sí era la más ñoña del grupo, también se hizo experta en acordeones: desde la maña para elaborarlos a computadora con todo y fórmulas en Arial a 7 puntos, con diferente color según el tema, hasta las técnicas para sacarlos mientras transcurría el examen sin que el profesor o profesora en turno lo notara.

Así, con un promedio de excelencia, transcurrió toda la primaria. Entrando a la secundaria las cosas se ponían más complicadas en cuanto a números se trataba; no obstante, sus trucos parecían ser infalibles, sólo Esther, su mejor amiga, sabía de ellos.

- ¿Y no te da miedo que te cachen?- preguntaba Esther cuando Yadhi le contaba sus mañas mientras hacían tarea en equipo.

- No. El chiste es no ponerse nerviosa, porque si lo haces solita te delatas.

- A mí sí me daría miedo.

- Lo bueno es que tú no necesitas hacerlo. Eres la de mejor promedio en el grupo ¡Matadita ésta! Además estás bien guapa, no sé cómo es que todavía no tienes novio. Tienes todo para triunfar.

- Cállate que me chiveas.

Esther no necesitaba copia ni acordeones. A ella se le daban los nmenes diferentes por grupoa de sus ex3 segundos, seguareas; explicaba los temas m que solúmeros de forma muy natural. Eso de los catetos, la hipotenusa y demás era un lenguaje natural, incluso se autodenominaba “La Hija Perdida de Baldor”.

Cuando ambas chicas entraban a tercer grado recibieron una noticia: la profesora de mate que solían tener había sido cambiada de escuela. En su lugar llegaba Eliseo Bohórquez. Cuando el director lo presentó al grupo todos los jóvenes se preocuparon, uno de ellos lo conocía por su hermano, decían que el nuevo maestro era un tipo de cuidado.

Se decía que no permitía la entrada al salón de clases si los estudiantes tenían la camisa desfajada; revisaba minuciosamente las tareas; explicaba los temas más rápido que cualquier otro, preguntaba si había dudas y si nadie externaba algo en 3 segundos, seguía con otro tema. Se decían tantas cosas, pero lo que más temor fundaba era la fama de sus exámenes: 2 ó hasta 3 exámenes diferentes por grupo, con una hoja de respuestas con círculos para rellenar y 5 hojas blancas para hacer los procedimientos porque calificaba eso y el resultado. Era de los que cambiaban de lugar a los alumnos y ordenaba poner las mochilas al frente, sobre el pupitre sólo borrador, lápiz No. 2 y sacapuntas. No había permiso para ir al baño.

Su atuendo reforzaba la fama: camisa de cuadros bien fajada, cinturón café intachable, pantalones de vestir con una línea perfecta en el planchado, zapatos negros siembre muy bien boleados. Una complexión rechoncha que recordaba a Garfield, cabello notablemente teñido de negro, bigote grueso, lentes con tecnología transitions y aumento considerable que, por alguna extraña razón, estaban oscuros casi todo el tiempo, moreno tostado, nariz de cacahuate con una voz gruesa. Era un cincuentón.

- No chingues ¿Estudiaste?

- No güey, creo que ahora sí me voy a extra.

Iguales a ésta, así eran las conversaciones que abundaban en el grupo. Yadhira estaba preocupada, en el primer parcial Eliseo había descubierto a dos alumnos dándose copia, lo estaban haciendo de manera tan sutil que para sorprenderlos se debía tener un agudo sentido de la vista y del oído. Bohórquez demostró ser un cazador de tramposos y un verdugo único: los mandó directo a extraordinario. Yadhi había aprovechado el drama que provocó tal acción para sacar su acordeón y por eso no fue pillada.

En el segundo parcial también tuvo suerte. Se sentó al lado de Esther y alcanzó a copiar el procedimiento del problema matemático con mayor validez mientras el director platicaba con el profesor en la puerta del aula sobre la marcha que tendrían al día siguiente.

Ahora, por si fuera poco, el nerviosismo aumentaba. Eliseo decidió valorar el examen final con un 50% de la calificación anual.

- Estudien bien, porque en la evaluación final sólo se tomará en cuenta el examen que, como ya saben, vale la mitad de su calificación del año. Además, no sólo vendrán temas de este ciclo escolar, sino de los 2 anteriores. Como revisé sus calificaciones de primero y segundo y no observé problemas, se supone que el examen deberá ser cosa sencilla para ustedes- señalaba el profesor mientras lo alumnos sentían que era mejor que ese señor clavara una estaca en los pechos de cada uno.

- ¡Puto ése! Seguro no se lo cogen bien en su casa. Lo odio- exclamaba Yadhira durante el receso cuando estaba con sus amigas.

El día de la prueba final llegó. Todos habían madrugado, pues Matemáticas era la primer clase del día. Faltando 10 minutos para las 8 am, el grupo entero estaba sentado en su pupitre (a excepción de los que fueron enviados a extra, claro).

Esther aún repasaba sus apuntes, no quería dejar lugar a dudas. Yadhira estaba sentada detrás de ella, esperaba que no la cambiaran de sitio, repasaba su acordeón impreso con letras blancas en un papel rojo que sustituían la etiqueta de su refresco, tal como lo había visto en internet. Temblaba de nervios, otras veces tenía cierto grado de confianza al conservar algo de conocimiento por la hechura de sus papelitos. Esta vez, aunque le había dedicado mucho tiempo, su mente no era capaz de retener procedimiento alguno, ni siquiera recordaba cómo hacer una maldita “Regla de 3”.

Eliseo entró, cambió a 15 alumnos de lugar, a Yadhi no la movió. Los exámenes fueron repartidos y comenzaban las 2 horas de martirio.

1 hora y 33 minutos después, Yadhira tenía 7 de los 10 procedimientos que había copiado de su amiga sin que Bohórquez lo notara. La misión había dado éxito. Esther se levantó de su lugar con varias hojas en su mano, acababa la evaluación sin problemas. Cuando recogió su mochila, el profesor la vio con unos ojos de deseo que no disimularon en lo absoluto cómo la desnudaba con la vista. Yadhi lo notó poniendo un rostro de indignación que tampoco pudo ocultar, pero nadie más vio el acto, todo mundo estaba concentradísimo en su examen.


Al día siguiente llegaron los resultados:

No.
NOMBRE
CALIF.
1
Abascal Juárez Yolanda
7.8
2
Aguilar Méndez Teresa María
7.2
3
Aguilar Montes Rosario
8.3
4
Ballesteros Díaz Ramón Eriberto
9.1
5
Barrientos Márquez Adolfo Jonás
6.3
6
Basaldúa Riveros Jorge Antonio
S/D
7
Briseño Ortiz Juan Miguel
8.7
8
Cárdenas Muñoz Sofía Margarita
6.9
9
Díaz Flores Francisco Javier
7.8
10
Domínguez Peralta Diego Armando
2.4
11
Domínguez Ramos Yadhira
9.3
12
Esparza Vásquez José Luis
6.3
13
Lima Gutiérrez Oliva Rosario
8.8
14
López Cruz Tomás
8.5
15
Medina Hernández Oliver Alejandro
7.1
16
Miguel Pérez Amanda
7.4
17
Olazo Jiménez Leonel
6.0
18
Pérez Castro Esther
4.8
19
Ramírez Peña Susana Leticia
8.1
20
Sosa Herrera Mercedes
7.7
21
Torres Galán Carolina
6.9
22
Ugartechea Montero Rodolfo Josué
S/D
23
Urachástegui Onofre Gerardo Antonio
9.1

Esther no lo podía creer. Tenía que ser una equivocación, cualquiera podía reprobar pero ella no, no había posibilidad. Yadhira sospechaba del profe, para mal. Estaba segura que era una acción del maestro para acosar a la alumna, no había otra razón. Lo más evidente eran los resultados, pero no podían llegar y decir: “Yo sé que se equivocó porque me di copia de Esther y tuve 9.3”.

Las dos convencieron a Jorge y a Rodolfo (que con ese S/D no tenían derecho a examen al ser quienes habían sido sorprendidos en el primer parcial) de unirse al plan, argumentando que ellos se verían beneficiados. Todo quedó acordado y Esther buscó al profesor cuando todas las clases del día terminaron.

- Profe ¿Puedo hablar con usted?

- Claro. Dime, Esther. – La escaneaba con su mirada lujuriosa.

- Quiero hablar sobre mi calificación. Es que me parece que está mal.

- Uy, mi’ja. Las calificaciones ya no se cambian –se acercó a ella rápidamente y la tomó a la fuerza por la cintura, insinuándosele de forma descarada –Ahora que si quieres, podemos arreglarnos.

- ¡Déjela, profe sucio, puerco, elefante lujurioso pendejo! Lo vamos a reportar por caliente –Yadhira entraba de sorpresa al salón.

- ¡Tú cállate, chamaca burra! Bien que me di cuenta que te copiaste, pero no se la voy a hacer de pedo a nadie. Sólo porque Diego Armando es muy pendejo lo tuve que reprobar, pero si sigues de estúpida, tú también te vas a extraordinario. Además, no me puedes acusar de nada. No tienes pruebas.

- Usted tampoco tiene pruebas de que me copié. Además, lo estamos grabando –Yadhi estaba decidida, su inteligencia era evidente.

- ¡Me lleva la chingada! –el profesor sintió temor, no veía cámaras pero por la seguridad con la que hablaban las alumnas sabía que tenían la situación en sus manos- Está bien, hijas de su madre. Yo te apruebo en la materia pero no le muestran el video a nadie y ahí que muera. Es más, traigan el video y lo borran ahorita mismo.

- También póngales calificación aprobatoria a Jorge y a Rodolfo.

- Sí, como quieran, pero borran esa madre.

Hicieron pasar a sus 2 compañeros, Jorge había grabado la acción desde afuera a través de la ventana, muy bien escondido. Mostró al profesor cómo lo borraba de su teléfono.

Días después, las calificaciones fueron asentadas en las boletas, los 4 compañeros pasaron la materia. Lo que el Eliseo no sabía es que el archivo de video fue transferido al teléfono de Rodolfo gracias a la magia del bluetooth antes de ser eliminado. Una vez a salvo, los 4 estudiantes decidieron subir el video a la red, se hizo viral en la secundaria y Eliseo Bohórquez nunca más volvió a dar clases.

(Imagen tomada de http://vivirsalud.imujer.com/5069/en-que-consiste-un-examen-psicometrico?utm_source=gimgs&utm_medium=img2node&utm_campaign=hotlink)

3 comentarios:

  1. Para ser la primera, bien. Pero me hubiese gustado un remate mejor elaborado, lo sentí muy a prisa, algunas partes con problemas de estilo pero bien. (Jejejejeje algunas descripciones me hicieron recordar) felicitaciones y saludos.

    ResponderBorrar
  2. Me diste tips para mis exámenes jeje

    ResponderBorrar
  3. A q esther ttan buenota y lista......seguro al final la preño uno del conalep XD

    ResponderBorrar

Deja tu comentario-crítica-sugerencia-castre-emiticón o lo que sea. Es bien recibido.